“Nunca es demasiado tarde para encontrar algo que te apasione”, podría ser el lema de Amna Al Haddad, una mujer periodista que comenzó a experimentar en el mundo del deporte simplemente como una forma de escapar de la vida socialmente limitada que tenía en los Emiratos Árabes.
Su carrera se inició en el crossfit pero luego, Amna encontró en el levantamiento de pesas su verdadera motivación. Luchó contra los prejuicios de su país que no permitían a las mujeres hacer de este deporte una profesión, ni participar en campeonatos y torneos.
Fue recién en el año 2000 cuando los Emiratos Árabes dejaron que las mujeres participaran en la halterofilia, exigiendo eso sí, el uso completo de ropa que tapara el cuerpo.
Así fue como Amna Al Haddad hizo historia al convertirse en la primera mujer musulmana en competir en Europa y América, y lo hizo vistiendo orgullosamente un hijab.
Desde ese momento, las niñas musulmanas de todo el mundo pudieron ver en Amna un referente, dejando de lado la difícil cultura que no permite a niñas y mujeres realizarse más allá del matrimonio.
“Cuando las cosas se pongan duras, vuélvete más dura que ellas”, es el mensaje de esta tremenda levantadora de pesas, Amna Al Haddad.